Santo Domingo Tehuantepec, Oaxaca,- En la época prehispánica el calpixqui o mayordomo era elegido por su don de servicio.
Cuando el teopixqui o sacerdote supremo presidía los sacrificios a los dioses, el calpixqui ya había proveído todo lo necesario para la excelente celebración de los mismos, por ejemplo, proporcionaban a los mallis, quienes eran prisioneros de guerra utilizados para el sacrificio humano.
La importancia de ser mayordomos, obedecía al deseo de alcanzar un estatus social alto y así ser muy respetados, y para conseguirlo, se endeudaban a tal grado
que comprometían su mano de obra por adelantado para que así pudieran solventar los gastos de una celebración que sería inolvidable, por eso es que cuando los españoles llegaron, los indígenas siguieron incurriendo en esta practicas y la mayoría fue esclavizada, sin opciones para recuperar su libertad.
Después de la conquista por la espada vino la conquista espiritual, de ahí que lo mismo que pasó con los teopixquis o sacerdotes supremos, pasó con los calpixques o mayordomos; fueron convertidos al cristianismo y utilizados para procurar la rápida evangelización de los indígenas. A partir de ese entonces los mayordomos comenzaron a encargarse de la organización de las festividades del santo patrón de sus barrios.
La Obligación
Consiste en llevar todos los jueves y domingos a la iglesia del barrio, aceite, flores e incienso y entregárselo al xuana para que este les dé su utilidad preestablecida.
- Cumplir con las costumbres y tradiciones asistiendo a todas las fiestas en las que son invitados; acudir a los sepelios, pues se debe de estar con el pueblo en las buenas y en las malas; también cumplir con las festividades del barrio y es ahí en donde se realiza el mayor gasto, por eso se dice que para ser xhuana primero se debe de haber sido mayordomo (esto no en todos los barrios).
Con Información de: Revista Comtempla