Santo Domingo Tehuantepec, Oaxaca (Cortamortaja). -El Istmo de Tehuantepec se ha convertido en un referente en la cuestión festiva, tanto es sus celebraciones religiosas, como en las familiares, civiles y en particular las llamadas velas.
Estas celebraciones nocturnas que tanto han gustado a propios y extraños por su gran belleza y esplendor han ido evolucionando, pero en algunos casos, también se han ido perdiendo.
Tehuantepec, a fines del siglo XIX y principios del XX, tuvo una gran cantidad de velas que paulatinamente fueron desapareciendo con la llegada de la modernidad.
En todo el año, existían velas que festejaban a cierto grupo de personas, otras más ligadas al ámbito religioso, como lo son la "Vela Viaza" y la "Vela Paloma", ambas del barrio Jalisco, en donde se festeja a la virgen del Rosario, patrona del lugar.
Se tiene registro que para el año de 1863, la Vela Paloma, ya se realizaba en este barrio tehuano, teniendo como himno, el vals del mismo nombre: La paloma, antiguo vals de la época del segundo imperio que gustó mucho a las familias de abolengo.
Tiempo después surgiría la "Vela Viaza" como referencia a las antiguas zanjas que se formaban a las orillas del río Tehuantepec y que hoy es símbolo de la gente humilde del mismo barrio.
Dos grandes velas que han sobrevivido al paso de los años, gracias al amor y esfuerzo de los habitantes de este barrio para preservarlas por muchos años y seguir siendo el orgullo de Tehuantepec.
